Para lady Francesca de Lyle no habia duda: entre los lujos de una mansion inglesa y los peligros del desertico interior de Australia, elegia lo segundo. Estaba enamorada del rudo Grant Cameron y junto a el encontraria todo lo que deseaba y necesitaba. Grant se senta confuso. Quera a Francesca, pero tema que esta no soportara la dureza del medio y decidiera un da regresar a su mundo privilegiado en Europa. Aunque pareca dispuesta a aprender y demostraba ser valiente, no estaba seguro de si deba arriesgarse a pedirle que fuera su mujer.